Cuando la prueba terminó y todos gritaban… ¡ Luisa eres Oro !

Foto/Suministrada. Luisa Fernanda Naranjo – Ciclista

Mi nombre es Luisa Fernanda Naranjo Henao, nací el 12 de diciembre del año 1994, actualmente soy Fisioterapeuta y aspirante al título de Magister en Rehabilitación Deportiva otorgado por la Universidad Autónoma de Manizales, practico deporte desde el año 2000, o sea desde la edad de 5 años.

Inicié con la disciplina del Patinaje de Carreras hasta el año 2009, de ahí salté a un reto totalmente diferente, entré a triatlón en el año 2010, aquí es donde inicia mi primera anécdota, donde «a las malas» aprendí que el deporte de alto rendimiento es para ganadores, y no me refiero a quienes ganan todas sus carreras o torneos, me refiero a quienes ganan la lucha contra el maltrato psicológico y el acoso.

Seré muy breve, puesto que este acontecimiento, lo cuento para que las generaciones presentes y futuras entiendan que no es fácil llegar a la cima, hay que entrenar bastante duro, sacrificar muchos estilos de vida que la gente tiene, pero sobre todo, aprender a sobrepasar las burlas, los comentarios y sucesos traumáticos que pueden llegar a vivir durante su carrera deportiva.

No entraré en detalles, pero solo comento que el tramo de tiempo entre el 2010 y el 2013, fue el detonante para volverme una persona más fuerte, ya que fui víctima de múltiples maltratos psicológicos por parte de mi entrenador en ese entonces, sin mencionar que la gente (no todos obviamente) se centraron más en inventar cosas de mi vida que ni yo misma conocía, en lugar de centrarse en ellos mismos; fue muy difícil puesto que yo era una niña aun, no tenía una personalidad definida como la de ahora 10 años después, para defenderme o tolerar las cosas con mayor madurez, pero en ese tiempo tenía dos opciones, o me retiraba y dejaba que mis aspiraciones quedaran en eso, o me ponía en frente del problema y salía adelante.

Bien, hoy en día una parte de mi agradece profundamente haber vivido esta desagradable experiencia en este deporte, por ello, hoy estoy en el Ciclismo, logrando metas que ni yo misma alcancé a imaginar cuando era niña, y cada día recuerdo eso para ir por más, no llevo ni el 50% de lo que quiero logar.

Foto/Suministrada. Luisa Fernanda Naranjo – Ciclista

Es muy gracioso, porque en ese tiempo salió una nota de Rigoberto Urán donde decía que había pasado miles de cosas horribles antes de llegar donde había llegado, y recuerdo que ese día le dije a mi madre que yo jamás sería tan grande como él o como los otros campeones, puesto que yo no había vivido algo tan drástico; fue como haber invocado al diablo cuando dije eso, porque pasó muy poco tiempo para que empezara este acoso.

Me quedó claro que cada campeón tiene su historia oscura detrás de cada triunfo

La mía es esta, porque aun en mí retumban las horribles palabras que me decía mi entrenador en ese entonces, la más latente después de 8 o 9 años fue “ usted no es nadie, usted no sirve para nada, la gente pensará que exagero, pero mi defensa contra esto, es que me lo dijo estando mi madre a mi lado, ¿…qué creen que puede sentir una madre escuchando que le dicen eso a su hija?.

Aprendí que los campeones nacen, pero gran parte de ellos se hacen con los sucesos malos que viven, las experiencias buenas sirven como referente, pero las malas te vuelven el mejor.

Después de esto y ya conociendo a mi actual entrenador, Fernando Gutiérrez Rivillas, quien no solo es mi mentor en la bicicleta, sino que es familia, porque conoce absolutamente todo de mí y además de eso, me recuerda que se puede llegar a donde yo quiero, empezaron a pasar las cosas buenas, obviamente no todo se gana…

Foto/Suministrada. Luisa Fernanda Naranjo – Ciclista

…hay carreras que se han perdido por estupideces, otras por accidente, otras porque las contrincantes fueron mejores, y aun así, han llegados las carreras donde todo es luz.

Ya llegando a una parte más contemporánea, pensando en los pasados Juegos Nacionales, recuerdo que un día don Fernando se sentó conmigo en una cafetería y cogió un papel y un lapicero, y me preguntó: ¿a qué le vamos a tirar a en los juegos? , la verdad la pregunta me sorprendió bastante, siempre pensé que él tenía un plan para todo, ahí entendí que él no me entrena por ganar algo, él lo hace con base en mis aspiraciones:

…les respondí que yo quería ganar en la pista, sentía que era un reto nuevo para mí, ya que en la ciudad de Manizales no contamos con un velódromo reglamentario, y para el departamento de Caldas, la disciplina es totalmente nueva, don Fernando simplemente me sonrío y tacho la opción de la ruta con el lapicero, me advirtió que si nos íbamos a enfocar en la pista, sería un 100%.

Foto/Suministrada. Luisa Fernanda Naranjo – Ciclista

Creo que no es necesario explicar la clase de entrenamiento que tuve para éstas justas, solo digo que no me daban ganas de pararme de la cama después de llegar a la casa.

Cuando llegamos a los Juegos, no hubo momento donde yo no sintiera la piel erizada, en cada instante tenia muchísimos nervios, también miedo, ansiedad, todo lo que puedan imaginarse, solamente pensaba en correr y darlo todo esperando que saliera bien, el primer día de competencia  (prueba del Ómnium) donde mi madre y don Fernando fueron espectadores, obtuve una medalla de Bronce, lastimosamente perdí el Oro en la prueba de la eliminación (la corrí terriblemente mal),

…cuando estaba en la premiación de ese Bronce, mi celular no dejaba de sonar, todo el mundo me felicitaba, pero yo no podía dejar de sentirme mal, tenía un sabor agridulce, ¡Sí! Era una medalla en Juegos Nacionales y en Pista, pero no era lo que yo quería, para lo que me había preparado, ese día me acosté a dormir con la firme convicción de ser Oro al día siguiente.

Foto/Suministrada. Luisa Fernanda Naranjo – Ciclista

Cuando la prueba terminó y todos gritaban ¡ Luisa eres Oro !

Cuando se llegó la prueba por puntos, recuerdo que todo iniciaba a las 8 pm, mi madre y don Fernando ya se habían regresado para Manizales, ese día mientras calentaba para la prueba, sentía que mi cuerpo estaba muy fuerte, como se dice en mi deporte “no me dolía nada”, y que raro, porque esa sensación de fuerza me puso más nerviosa y asustada de lo que estaba, faltaban 5 minutos antes de iniciar, y recuerdo que fue la tortura más horrible del mundo,

…se me aguaron los ojos  y le preguntaba a Dios por qué no hizo que yo me arrepintiera de correr antes de tiempo, no quería correr, estaba muerta del susto, me temblaban las manos y bueno, finalmente tocó secarme las lágrimas del miedo que tenía.

Cuando la prueba inició, mi mente quedó en blanco, creo que ni recuerdo como me llamaba, lo que me despertó nuevamente fue el susto a no caerme, ahí fue cuando empecé a salir a buscar los puntos de la prueba, esto lo hice unas 3 veces… cuando vi que iba ganando, mi confianza volvió por completo, fue muy bonito porque ya no atacaba por miedo, atacaba porque sabía que tenía todo para ganar,…

Foto/Suministrada. Luisa Fernanda Naranjo – Ciclista

…no imaginan como se me inflaba el ego cuando veía a los entrenadores de los otros departamentos gritándole a sus corredores que no podían dejarme ir, estaba tan confiada de mi misma, que cada vez que cogía una vuelta, no esperaba ni dos para salir por la otra…

Fue tanta la emoción que nuevamente volví a llorar, y también fue muy graciosos porque yo no lo creía, y los departamentos rivales y la potencia en la pista, tampoco, ya que exigieron a los jueves nuevamente ver la prueba en el monitor, era algo absurdo para ellos que una chica de un departamento pequeño y sin pista, fuera el oro de la prueba por puntos.

Lea más sobre: Mi Crónica Deportiva, la voz de los verdaderos protagonistas

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3 Respuestas

  1. 29 de junio de 2020

    […] Cuando la prueba terminó y todos gritaban… ¡ Luisa eres Oro ! […]

  2. 21 de agosto de 2020

    […] – Cuando la prueba terminó y todos gritaban… ¡ Luisa eres Oro ! […]

  3. 27 de agosto de 2020

    […] Cuando la prueba terminó y todos gritaban… ¡ Luisa eres Oro ! […]

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