Lágrimas en los Olímpicos de Tokio 2020

La sudafricana Tatjana Schoenmaker rompió en llanto durante su premiación en los Olímpicos de Tokio 2020 cuando logró su segunda plusmarca mundial en Tokio 2020 durante la final femenina de los 200 metros braza. (Photo by Oli SCARFF / AFP)

Las lágrimas en los Olímpicos de Tokio comenzaron el día 23 de enero de 2020 cuando Wuhan, de la República Popular de China, comenzaba su cuarentena que luego llegaría a Colombia el miércoles 25 de marzo de 2020.

El mundo deportivo se paraba tras 10 años, o como mínimo 4 años, de preparación de escenarios, entrenamientos, participaciones deportivas; y faltando solo 150 días para el inicio del certamen más grande a nivel de competición entre países, los Juegos de las XXXII Olimpiadas Tokio 2020.

Maria Isabel Salcedo Chaparro – Bloguera

El mayor reflejo de sentimientos está en las lágrimas, secreción oleosa con sales inorgánicas, proteínas acuosas, enzimas, glucosa, urea, electrolitos, glucoproteínas y biopolímeros superficiales activos, que son la respuesta a sentimientos de tristeza, alegría, estrés o emoción.

Si lo miramos de esta forma, son tan valiosas como los diamantes o las perlas que no aparecen por cualquier razón.

Los deportistas y paradeportistas que participan en estos Juegos Olímpicos salidos de todo contexto, atípicos y después de haber sobrellevado tantas situaciones de estrés, han reflejado todo esto en el pódium.

Poder acariciar y colocarse una medalla olímpica después de todo, ha reflejado las lágrimas en Tokio más significativas en la historia de estas justas.

Los pronósticos y estadísticas no han funcionado, todas las participaciones han sido merecidas y salidas de la caja.

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Romper los entrenamientos en un ciclo olímpico significa, que cuando ya estabas al 100% de tu entrenamiento para darlo todo en la competencia, debes de ser desactivado.

Desgarrador llanto de Hidilyn Díaz tras dar a Filipinas el primer oro de su historia (Foto: AFP)

Volver atrás a organizar un periodo que se convirtió en anacrónico para el mundo, significaría que para cuando puedas competir, no solo ha cambiado tu forma de entreno, si no que debes de haber cumplido un año más, esto en el deporte de alto rendimiento cobra factura.

Quiere decir que, aquellas estrellas en ascenso están más cerca de tus marcas, pero que se te cierran las posibilidades de subir al pódium y que debes esforzarte más de lo que estabas acostumbrado en los periodos lógicos de entrenamiento.

Para los Olímpicos de Tokio, también Cambió la administración deportiva

Lorena Arenas le da la primera medalla en marcha a Colombia (Foto: COC)

Los comités ejecutivos de los Comités Olímpicos – CO cumplieron sus periodos; aquel presidente que se comprometió y conoció sus atletas desde el inicio de su periodo y que en principio los acompañaría a Tokio, ahora no lo podría hacer; o que el Ministro de Deporte ya no es el mismo compartió, e hizo vericuetos ante el Ministerio de Salud para que los tiempos de nuestros deportistas no fueran tan prolongados en cuarentena, y proporcionara de alguna manera la seguridad y condiciones para sus prácticas.

Son muchos cambios a nivel organizacional, que de una u otra manera afectan el desempeño de nuestras figuras en campeonatos como los juegos olímpicos, por eso aparecen nuestras lágrimas en Tokio.

La venezolana Yulimar Rojas no pudo contener las lágrimas después de lograr la presea dorada y récord olímpico mundial en triple salto en Tokio 2020. (Foto: AFP)

Vale cada lágrima, cada esfuerzo demostrado en el momento de acompañar en el pódium a quienes en ese momento entonan su himno; el pódium de estos juegos parece tener un solo nivel, cada lugar ha derramado lágrimas en Tokio.

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