La violencia contra los árbitros, un mal que se sostiene en Colombia

Semilleros Deportivos / Árbitros

Foto / Semilleros Deportivos / Carlos Marín / Árbitros de Risaralda

La semifinal de la Copa La Patria en Manizales se suspendió por la agresión que sufrió uno de los jueces, un hecho que hay que lamentar, pero que ratifica la necesidad de tener acciones contundentes desde los organismos deportivos para concientizar sobre el resto y la ética deportiva.

El hecho se registró este miércoles 18 de diciembre, en el duelo que sostenían Inmedent Deportes Caldas La Red y Masíaz Fútbol Club, en el trámite del compromiso, una falta provocó la expulsión de un jugador, a lo que este sin mediar respondió con un cabezazo al juez central.

El hecho se da en medio de un panorama donde los actores del deporte en el Fútbol aficionado están llamados a generar mayor reacción desde sus estructuras organizativas para evitar este tipo de comportamientos, que no solo repercuten de manera psicológica, sino que también en la emoción social de las masas.

Algunos familiares, jugadores y aficionados al fútbol se desentienden del factor humano de las personas que participan en un evento deportivo. Encontrando en los árbitros actores vulnerables en los espectáculos y no figuras de autoridad que mantienen la normativa del juego al interior y sus alrededores.

En los últimos años, los casos de agresiones a árbitros se han elevado, en los últimos 24 meses, Semilleros Deportivos ha registrado seis agresiones en el contexto regional, a esto se suma las riñas entre los familiares de los deportistas, que en su mayoría han sido en el ambiente del fútbol base, es decir, categorías menores.

El llamado es para los organismos del deporte asociado, clubes, ligas y asociaciones, para que promuevan campañas de concientización por el ejercicio humano de regular bajo la norma las actividades deportivas, hablando específicamente del rol de los árbitros.

Aunque el asunto se extiende, tiene tentáculos. Los mismos deportistas están manifestando comportamientos antideportivos ante las actuaciones de los jueces, procediendo a maltratos y descalificativos, generando una cadena de conductas entre los familiares que los acompañan a los encuentros.

Algunos familiares no se quedan atrás, en el descontento de las pérdidas, arremeten contra la humanidad de los árbitros, en acciones desproporcionadas que perjudican, lesionan y comprometen hasta legalmente los campeonatos.

La motivación es a iniciar un 2020 con planes de acción desde las corporaciones, organizaciones, empresas públicas y privadas que promueven campeonatos de manera frecuente, sin obviar la responsabilidad que tienen.

«Unidos somos más. Más deporte, más región»

También te podría gustar...

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *