La quindiana Laura Tamayo quiere conquistar la Liga con Atlético Nacional
Con apenas 21 años la representante del fútbol quindiano llega como refuerzo a la plantilla del verde de la capital antioqueña con el cual sueña ser campeona.
Laura Viviana Tamayo Vásquez juega como defensa central, allí se desempeñó durante las dos pasadas temporadas con el Deportes Quindío, elenco de su natal Quindío que le abrió la posibilidad de llegar al mundo profesional y ahora llega con una nueva ilusión para vestir el equipo de sus amores: el Atlético Nacional de Medellín.
Inició en el Club ASSC Colombia donde dio sus primeros pinitos para irse formando y llegar a ser profesional algún día. Luego de un tiempo su talento empezó a hablar por ella y por eso fue convocada durante cuatro años por la Selección Quindío en sus diferentes categorías.
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Un vitrina que le abrió las puertas para que el nuevo equipo del Deportes Quindío Femenino se fijara en ella y la tuvieran en cuenta no solo como una jugadora más, sino también siendo la capitana de la escuadra.
Su papá fue su inspiración
Desde muy pequeña, acompañaba a su padre a todos los partidos y recochas del barrio donde vivían, por lo cual la pelota comenzaba a ser su gran amiga. Su gusto fue creciendo y allí ingresó a las escuelas para seguir con su fundamentación, siempre con el aval de su progenitor.
“Me gustaba jugar al fútbol y él siempre me metía a jugar con los muchachos o niños con los que jugaba, desde ahí y gracias a mi papá fue que nació esta gran pasión que hoy en día vivo”, puntualizó Laura en charla con Semilleros Deportivos desde Medellín, su lugar de residencia en la actualidad.
Paso del amateurismo al mundo profesional
Poco a poco y año tras año, el fútbol femenino en Colombia se sigue abriendo su propio espacio. Ya son dos años en los que la Liga Profesional ha paseado su fútbol por los estadios del país y para esta, la tercera versión, quiere seguir progresando.
Por eso al referirse del sustancial cambio, Laura Viviana no duda en afirmar que:
“Es un cambio totalmente diferente pensaría yo, pero más a nivel del Quindío propiamente. Porque lastimosamente allí no hay mucho apoyo para el fútbol femenino. Obvio es un cambio diferente, porque en el amateur te encuentras con equipos con menos nivel, en cambio en el profesional te encuentras con equipos que todos absolutamente todos, son equipos muy buenos y con el nivel de exigencia súper alto”, precisó.
Con el elenco cuyabro, Laura se destacó siempre siendo titular, líder y una de las jugadoras con mayor talento de exportación, por eso al hablar de su etapa vivida allí, Tamayo agregó que “la verdad fue una etapa muy bonita y excelente, eran entrenos y partidos de máxima exigencia donde el fútbol se vivía al máximo y se disfrutaba”, indicó.
Su llegada al elenco antioqueño
Con el anuncio de la Dimayor y luego de varias reuniones con jugadoras, dirigentes e interesados por volver a iniciar la Liga Profesional Femenina, la mayoría de los equipos abrieron convocatorias y veedurías para elegir nuevos talentos para reforzar los planteles.
Fue así como el subcampeón del año pasado, el Atlético Nacional Femenino publicó en sus redes sociales que realizaría una serie de convocatorias abiertas a todo el país y por eso Laura no dudó dos veces en viajar y presentarse.
“Me entero de la convocatoria de Nacional y decido venir a probar, eso fue del viernes 31 de mayo al domingo 2 de junio, donde finalmente me dicen que pasé al tercer y último ciclo, por lo que me debía quedar toda la semana. Entrene de martes a sábado y ese mismo día me dieron la noticia que había quedado seleccionada entre 60 niñas que se presentaron, siendo yo la única que llegaría al equipo profesional”, agregó la férrea defensora central que además añadió que poder vestir ese uniforme era uno de sus grandes sueños, ya que abiertamente y sin ningún problema reconoce ser hincha de esa institución.
No siempre fue defensa
Aunque no muchos lo crean, Laura no siempre fue defensa central, recién comenzó su carrera se desempeñaba como delantera pero sus entrenadores la fueron bajando, pasando a ser volante de creación donde jugó por varios años tanto en su club como en la Selección Quindío.
Pero debido a la falta de jugadoras con buen nivel en esa posición, fue la propia Laura la que decidió bajar a ser central “al principio no me gustaba porque me encantaba poner el pase gol o hacerlos, pero viendo que en el Quindío no habían muchas céntrales buenas, decidí cambiar y apoyar mi equipo allí, todos me decían que lo hacía bien y por eso me quede ahí”.
Una decisión que a su padre no le gustó mucho precisamente por su gusto de verla anotar goles o habilitar a sus compañeras, pero luego lo fue entendiendo y ahora la aconseja para mejorar en el día a día.
Habló del grupo que le tocó con Nacional
Nacida en el Quindío más precisamente en el hospital San Juan de Dios y donde sus papás vivían en el barrio La Patria. Laura fue creciendo en el barrio Rojas Pinilla segunda etapa, lugar donde se crio y empezó su amor por el fútbol.
Hoy en día se destaca por ser una jugadora muy rápida a la hora de los cierres, tiene buena técnica y buena tenencia de balón, cualidades que la llevan a sobresalir en su posición, pero al mismo tiempo sabe que una de sus desventajas es la estatura, ya que sus 1.65 metros a veces se quedan cortos para los balones aéreos, por lo que está trabajando en la saltabilidad y anticipo.
Su ahora nuevo equipo, el Atlético Nacional comparte el grupo A junto al Deportivo Independiente Medellín – Formas Íntimas, Once Caldas y Deportivo Pereira, por lo que esta quindiana destaca que será:
“Un grupo duro, con equipos que se preparan y que trabajan fuerte, pero donde nosotras con mucha motivación, mucha concentración y trabajando fuertemente, buscaremos no solo participar de la Liga, sino también ser protagonistas y lograr el gran objetivo que tenemos, que es ser campeonas este semestre”, concluyó la talentosa jugadora que además sueña con vestir algún día la camisa de la Selección Colombia.