En gimnasia, la inagotable pasión de Angélica Mesa. Superación y gloria.

Foto/suministrada por la deportista

Donde hay campeones hay historias, y para la muestra está la boyacense Angélica Mesa que lleva varios años representando a Risaralda en gimnasia artística.

Su hoja de vida muestra la trayectoria y el recorrido que forjan a un campeón, y que inició en un jardín infantil donde la singular atleta se destacaba, no precisamente por su serenidad o buen comportamiento, sino por estar haciendo maromas y saltando cada rato, algo que para la profesora no era normal a su corta edad. Tanta era la habilidad elástica de la niña, que la profesora le recomendó a sus padres inscribirla en un deporte que le quemara toda esa inagotable energía y particular habilidad para saltar y doblar el cuerpo.

Hoy a sus 31 años, la gimnasta recuerda esos momentos con alegría, porque de no haber sucedido, no tendría la oportunidad de seguir dándole glorias al departamento que la ayudó a crecer deportivamente y que la ha convertido en una de las cartas más representativas de Risaralda en la gimnasia para los torneos de este año.

En su trayectoria hay un listado de títulos, así como de medallas que no recuerda, aunque son muchas las que se ha colgado en las competencias, durante las tres décadas que lleva en el deporte acrobático.

Foto/Jonh Jairo Bonilla para Semilleros Deportivos

Eso sí, tiene la memoria fresca de la medalla que no se ganó en un campeonato inter clubes de Cali cuando en la premiación, varias veces llamaron a una Angélica y preciso, cuando ella se levantaba, descubría que era otra atleta con el mismo nombre. También recuerda los tres campeonatos del mundo donde ha participado y los juegos suramericanos y centroamericanos, donde ha dejado en alto al país.

Claro, estos años de triunfos y logros, no han sido gratis para Angélica quien ha superado situaciones dolorosas y tormentosas, como sus tres cirugías de rodilla, las lesiones en la espalda y una luxación de codo. Pero contrario a desanimarse o pensar en retirarse, la deportista ha recibido el apoyo incondicional de su familia y por esto se aferra más al deporte de sus amores, exigiéndose aún más en los entrenamientos y confiando en Dios.

Mi fórmula para mantenerme competitiva tiene muchos ingredientes, como recibir el apoyo de un círculo que te de mucho amor y que respete lo que haces y además, entienda el gran amor por este deporte, respetando el espacio que se necesita en los momentos emocionales que tenemos los seres humanos.

Foto/Jonh Jairo Bonilla

Es una fórmula extensa, pero destaco la motivación, la disciplina y la decisión de dedicarse a un deporte, aunque esto implica enfrentarse a muchas cosas, por eso se debe organizar una agenda diaria por mucho tiempo y exigirse, agradeciendo cada cosa que se va presentando. Esta es una receta requiere mucho amor, mucha pasión, respeto y compromiso para hacer una receta deliciosa y agradable, al gusto de cada uno. Dice Angélica

Sus metas a corto y largo plazo son mantenerse sana, mejorar su estado físico, cumplir con los objetivos que se han trazado con el entrenador y seguir soñando en grande con oportunidades no solo competitivas, sino aquellas que le permitan crear elementos nuevos para organizar sus planes y mejorar su rutina de entrenamiento.

Aunque la gimnasta acude al gimnasio de la 37, diariamente, también saca el tiempo para estudiar una licenciatura en educación física, además es profesional bilingüe. Sin embargo, sigue aferrándose al deporte que le ha dado gloria a su vida y por el que está dispuesta a seguir obteniendo triunfos para Risaralda, algo que coincide con las palabras de su entrenador Juan Carlos Agudelo…

No hay límite de edad para finalizar la gimnasia, este termina cuando la persona decide terminar”

«Unidos somos más. Más deporte, más región»

También te podría gustar...

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *