¿Cómo no agradecer y destacar la presentación del Once Caldas a lo largo del año?
Foto / Once Caldas
Mientras en Pereira y Armenia se debaten entre la desesperanza por el fútbol del ascenso, en Manizales viven uno de los mejores momentos futbolísticos de la historia.
Hace un año, el blanco blanco era candidato al descenso, y en el Eje Cafetero se auguraba el regreso del clásico ante el Deportivo Pereira en el Torneo de la B. Pero, poco a poco, Hubert Bodhert y sus dirigidos, cambiaron un panorama que hoy no deja más que satisfacción y reconocimiento al nivel futbolístico y de competencia al que llegaron, para convertirse en protagonistas indiscutibles del Fútbol Profesional Colombiano.
Fueron muchas las conquistas del onceno caldease a lo largo del 2018, la primera y tal vez la más importante, fue retomar la confianza de su hinchada que vio en cada partido, como desde el trabajo honesto y dedicado fue constituyendose una plantilla de jugadores que a la par de otras escuadras del país, fueron cohesionando un grupo digno de presenciar una final. Y no lo hicieron de cualquier manera, tampoco necesitaron del amaño de un árbitro, o las artimañas de un empresario, para figurar siempre en las mejores posiciones del torneo.
Fue evidente, que estar al frente de la clasificación general, era el resultado del buen trabajo futbolístico. Luego, la segunda gran conquista, fue alejarse del descenso.
Foto/oncecaldas.com
Pasó de ser un candidato de la B, a un candidato del fútbol internacional. Se puso de nuevo al nivel del «Rey de Copas», al punto de enfrentarlo en la instancia definitiva, donde perder no necesariamente le despoja de sus buenos créditos futbolísticos y por el contrario, advierten que será un año para cerrar con gran presentación en lo que resta de la Liga Águila.
La tercera inmensa conquista del Once Caldas, fue integrar jugadores de la región y algunos juveniles. Con ello se crea un capital social y humano al servicio del fútbol regional. Boderth, rescata en la presencia de Diego Arias, Alejandro Nieto, David Gómez, Israel Alba, Sergio Román, Alejandro García y otros juveniles el buen nombre del jugador regional. Prospectos que hoy son vistos con buenos ojos en el rentado nacional y también con proyecciones internacionales.
Y si seguimos intentando descubrir argumentos para resaltar la labor del Once Caldas, seguramente aparecerán más y más posibilidades de reconocerles en su oficio. Volvió la fiesta del buen fútbol al Estadio Palogrande, regresó el público que al principio de año parecía alejarse del máximo escenario futbolístico, el DT Bodhert se ganó el aprecio de la fanaticada, el periodismo aún siendo crítico reconoce el buen momento del equipo albo, etc… etc… etc.
Foto/ Adrián Rodríguez
La posibilidad de ser Campeón, se sostuvo hasta el último segundo de juego, y al final no queda más que recordar que los torneos de fútbol fueron diseñados para que todos pierdan, excepto el Campeón. Claro, hoy el Atlético Nacional goza del título. El mismo que se le escapó ante el Deportes Tolima, y que cargaba como una deuda ante su hinchada. Gozarán con el campeonato, pero no existe el mismo sentido en Once Caldas, donde pese a perder el título, se descubre un aliento sincero de que en la cancha hubo algo más que «huevos».
Gracias al Once Caldas S.A, por rescatar los buenos procesos. A todos sus dirigentes, al cuerpo técnico y a cada uno de los jugadores debemos decirles, gracias infinitas, por su talento y amor por la camiseta. Ser Subcampeón también es orgullo nacional.
