¿Y para cuándo la vaca pal’ deporte?
¿Y para cuándo la vaca pal deporte?
Foto / Carlos Marín
Por estos días el Alcalde de Pereira promueve la vaca pa las jirafas del Bioparque Ukumarí, una recoleta que permita el traslado de dos ejemplares desde México hasta la Perla del Otún. Apela al sentido cívico de los pereiranos para lograrlo.
Este medio de comunicación hace una reflexión frente a tal convocatoria, no porque el anhelo de traer las jirafas sea malo, sino porque se hace preciso recordar que el deporte necesita una gesta cívica de este nivel. Las jirafas son importantes al igual que cualquier iniciativa de ciudad, considerando que el desplazamiento de los animales es una apuesta importante al turismo de la región y el país, pero el deporte sí que lo es y más cuando el valor de la gesta se ve reflejado en sus habitantes que son naturales de estas tierras.
Este llamado al civismo de los pereiranos es liderado por el principal mandatario de la ciudad, hecho representativo y determinante para la motivación de los ciudadanos; es el Alcalde quién tiene la camiseta puesta por las jirafas y conocedores de nuestras realidades deportivas, en nombre de todos esos deportistas y escuelas y clubes, quisiéramos señor Alcalde que usted también liderara, en sentido metafórico, una gran vaca por el deporte.
Vaca para implementos deportivos, vaca para tapar goteras de los escenarios como el Coliseo de Combates y hasta del Estadio Hernán Ramírez Villegas, vaca para restaurar otras canchas en sectores populares, vaca para una pista de atletismo, vaca para una bolera, vaca para la pista del velódromo Alfonso Sarria, vaca para el maderamen del Coliseo Mayor, en definitiva una gran vaca para el deporte local.
Esperamos y deseamos que las jirafas puedan llegar a Ukumarí, pero también esperamos que pronto la noticia sea que el Alcalde de Pereira realizará un recorrido por los escenarios deportivos de la ciudad para priorizar la intervención de los mismos, con una vaca o con la destinación de recursos específicos. La gestión de una Alcaldía debe ser integral y el deporte de esta ciudad es una potencia que requiere el liderazgo de su primer mandatario, un liderazgo que requiere ser visto en la ampliación de ofertas deportivas, en la realización de más y mejores eventos deportivos de orden nacional e internacional.
Sin duda, todo su esfuerzo para traer las jirafas es valioso, pero será mucho más valioso si el mismo esfuerzo está enfocado en nuestra gente, y especialmente en nuestros deportistas. A cambio de dos jirafas, una apuesta por nuestros deportistas puede multiplicar el sentido de su gestión.
¡Hagamos vaca pal’ deporte señor Alcalde!
