“Un día lo soñé, hoy es realidad”, Anderson Ríos, Sub 20 del Deportivo Pereira
Foto / Carlos Marín / Anderson Ríos celebrando gol ante La Cantera
Desde niño quiso llegar a vestir los colores del onceno Matecaña, con compromiso, disciplina y respeto por la camiseta lo logró, ahora es un referente en la nómina semiprofesional de la divisa pereirana.
Por: María Camila Delgado Botero*
Deportivo Pereira Sub 20 tiene goleador. Anderson Ríos Restrepo, un hijo de la tierra, nacido el 4 de septiembre del 2000, ya completa cinco goles en la Súper Copa Juvenil organizada por la Federación Colombiana de Fútbol, y en la que a pesar de no tener buenos resultados y no ocupar los primeros lugares de la tabla, destacan jugadores como él, quién jornada tras jornada busca llegar al arco contrario para darle la victoria a los suyos.
Su camino en el fútbol comenzó cuando tenía ocho años, y para empezar decidió ingresar a la escuela del profesor Juan Muentes, ahí en su barrio: Los Almendros; impulsado por sus amigos, quienes asistían a la misma, empezaría a ir a los entrenamientos y a todos aquellos partidos que programaban semana tras semana.
Como todo niño pequeño, dispuesto a intentarlo en todos lados, solo duró un año y medio en la escuela que le dio las primeras bases, y tomó rumbo a las escuelas del equipo del cual es hincha, Deportivo Pereira, donde ganó uno que otro trofeo y vio más claro el camino hacia su sueño: ser futbolista profesional.
Foto / Suministrada
Después de cumplir dos años en las escuelas del equipo Matecaña, llegó a Profesionales, donde tendría un paso relativamente rápido, pues allí solo duraría un año; desde ahí, vestiría el uniforme de Indubolsas, equipo que le acompañó por varios años, formándolo como persona y jugador, y sobretodo dándole la confianza suficiente para que retornara al primer equipo de la ciudad, después de hacer las veedurías con el equipo Sub 17.
Desde enero del 2017 hace parte del Pereira, y comenta que para él fue “…una alegría inmensa el dar este paso tan grande, sabía que si quería cumplir mis sueños y seguirlos cumpliendo, debía y debo todavía poner de mi parte y dejarlo todo para seguir acá”.
Como buen jugador, se acopló rápido a su equipo de trabajo, y tuvo buen rendimiento en el torneo Sub 17 a lo largo del año, y para finales, mantendría el nivel bajo la dirección de Jorge Claudio Calabró, quien tomó las riendas del equipo para Copa La Patria en Manizales, donde no solo logró llegar a la final, la cual luego perderían contra Once Caldas, sino también logró anotar varios goles y ganarse la confianza de un técnico a quien hoy le agradece. De ahí, vendrían muchas oportunidades para ‘Luli’ (apodo que le colocó el Profe Calabró), una de las cosas que más recuerda es el gol que hizo en su primer partido de la copa manizaleña.
Foto / Deportivo Pereira
El agradecimiento que tiene hacia el el profesor Calabró, es retribuido por el argentino que confía plenamente en él. “Yo le decía ´Luli´por un jugador argentino que también se apellidaba Ríos, pero no tenían nada más en común” afirmó el estratega argentino, quien además comenta que Anderson tiene todas las condiciones para llegar a ser profesional, y que por esa razón se convirtió en una pieza fundamental de su equipo, “sé que su sueño es ascender y salir campeón con el Pereira, pero a mí me gustaría verlo en Rosario Central, aun así, él no tiene techo como jugador”.
Como es común al finalizar cada año, se jugaría la Copa Ciudad Pereira, y aunque el rendimiento del Deportivo Pereira no fue el mejor, Ríos marcaría dos goles que le servirían para su presente en la escuadra Matecaña; días después de la eliminación de este torneo, jugarían la final de la Súper Copa Indubolsas, certamen en el que también destacó al anotar nueve goles que le permitirían a su equipo avanzar ronda tras ronda.
Foto / Suministrada
Claramente lo más esperado para un jugador, es su primer convocatoria con el equipo profesional, este pereirano vivió esa experiencia el pasado 22 de febrero, cuando el profesor José Fernando Santa le brindó la confianza para viajar a Cota, Cundinamarca, al partido contra Fortaleza, por Copa Águila. “Sentí una alegría inmensa, pensé demasiadas cosas en ese momento, pensaba en que hace un año había jugado en la Sub 17, y ese día ya convocado para un partido profesional; los sueños se hacen realidad si se trabaja y se tiene fe, y eso era lo que yo venía haciendo, entrené muy duro ese día, y luego el profe ‘Copi’ me dice que lo habían llamado a decirle, me pasaron muchas cosas por la mente, es inexplicable”.
El delantero confiesa que aunque fue mucha la emoción, no lloró en ese momento, pero sí se dio el tiempo de pensar en los sacrificios, y sobre todo en aquellos que en algún momento no habían creído que podía lograrlo. Desde ahí, tendría más acercamiento con el equipo profesional y la oportunidad de ir a más partidos.
Foto / Carlos Marín
Ahora, disputa la Súper Copa Juvenil Sub 20, y es el goleador del equipo con cinco anotaciones, a pesar de que la mayoría de veces es suplente y cuando entra al partido pone el marcador a su favor, le ha demostrado no solo a la ciudad, sino también a sus compañeros, que merece un puesto en la titular y que está entrenando día a día para lograrlo.
Su último gol fue el pasado viernes 22 de junio, cuando su equipo cayó como local 2-1 ante Once Caldas, por la decimocuarta fecha. De este certamen, el partido que más recuerda fue cuando recibieron en el Mora Mora al Deportivo Independiente Medellín, y en el cual entró al segundo tiempo para anotar el gol de la victoria, situación que ha ocurrido en más partidos, definitivamente.
Así mismo, y aunque no estén en la parte alta en este torneo, él considera que “el equipo se está uniendo, tenemos muchas ganas y actitud, en lo individual hay muy buenos jugadores, con diferentes condiciones, pero todos con ganas de demostrar, destaco a Camilo Martínez y a Edwar Serna; y en lo colectivo es un equipo que cada día encuentra la mejor manera para jugar”.
Su objetivo es consolidarse en el equipo profesional y sumar minutos, es consciente de que debe seguir marcando para demostrarle al técnico sus capacidades. A corto plazo sueña con debutar, marcar varios goles, y salir por la puerta grande, como lo imaginaba cuando era niño, cuando se veía como profesional con la camiseta del equipo que ama. “El Deportivo Pereira aunque esté en la B, es un grande, tiene muy buena hinchada, y para mi es una felicidad enorme, el saber que pertenezco acá, que un día lo soñé y hoy es realidad. Soy un afortunado de Dios”.
A la hinchada pereirana le dice: “hay mucho compromiso, mucha fe de parte de todos los jugadores, crean que con la buena energía que tiene este proyecto, a final de año estaremos celebrando porque la ciudad merece un equipo en la A, que a final de año vuelvan las lágrimas de felicidad”
