Periodismo, de la ovación a la resignación; y ahora a la reinvención

Periodismo, de la ovación a la resignación; y ahora a la reinvención

Se conmemora una fecha más del oficio periodístico en Colombia, un día que seguramente pasará inadvertido como las otras 226 fechas que en poco más de dos siglos siguen reclamado la idoneidad del ejercicio, en medio de las exigencias que demanda las actuales formas de producción, circulación y consumo informativo.

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El oficio, que pasa por la devoción, la pasión y el amor, va incluso desde la convicción, la argumentación y hasta los tecnicismos; todo ello en un contexto histórico de humanidad que como bien lo expresara el premio nobel de física en los años noventa, Geoge Charpak, se ve enfrentado a una (tercera mutación) o transformación, que cuando menos exige comprender siete aspectos: el conocimiento, la tecnología, los nuevos lenguajes, la información, la comunicación, la innovación y la investigación. Todos ellos directamente relacionados con el periodismo.

La tercera mutación de la que nos hablara el pensador polaco hace ya una generación, sigue vigente en términos de exigirle a los profesionales del campo una comprensión y un ejercicio interdisciplinar. Difícil labor en medio de las veloces y hostiles condiciones que exige el mundo globalizado, tanto para el oficio como para la misma cotidianidad de la existencia humana.

Ya un reconocido médico colombiano (Alejandro Jadad) lo viene advirtiendo, como la posibilidad de avanzar hacia formas transhumanistas de la existencia, en las que el ser humano pierde su forma orgánica, y lo que alguna vez fue extensión de la mano, ahora se convierte en extensión del cerebro y espera transformarse en extensión informativa. Somos piel dirá la biología, somos fe dirán las religiones, somos información dirá el transhumanismo. ¿Y dónde están las posturas críticas sobre lo que queremos como profesión?.

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El ejercicio periodístico, hace gala del valor de la pregunta, de la posibilidad de la sospecha, de la validación de la fuente, de la exaltación de la verdad y de un sin número de virtudes que como oficio conserva, pese a los hechos que también han marcado sus controvertidas situaciones en la historia.

Sin embargo, no puede pasarse por alto esta fecha, o las otras dos que estable el calendario (4 agosto y el 15 diciembre) bien sean por ley o por hecho anecdótico, la labor periodística cumple hoy más que nunca un rol trascendental en el devenir de la sociedad humana. Por ello, no cualquiera puede ejercerlo, realmente se necesita preparación de nunca acabar, preguntas de siempre formular y verdades que sin excepción se deben descubrir.

Hoy, en el día del periodista en Colombia, la sociedad debe preguntarse ¿qué será de ella, sin un adecuado ejercicio periodístico?. Periodistas, se necesitan, convencidos y preparados para ejercer una labor que demanda pasar de la ovación y la resignación a la reinvención del periodismo en Colombia.

Feliz Día a todos los periodistas

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