Los veloces ojos detrás de la bola del tenis de mesa

Foto/Jonh Jairo Bonilla para Semilleros Deportivos

Uno de los deportes que más desarrolla el sentido de la vista es el tenis de mesa porque aquí los ojos deben reaccionar tan rápido que cualquier parpadeo a destiempo es motivo de perder la concentración, dicho de otro modo, un parpadeo puede ser el punto de quiebre para perder un set.

Claro, la visión de los deportistas son como los ojos del águila que buscan afanosamente el rápido movimiento de la bola del ping pong, la cual cuenta con un diámetro de 38 ó 40 mm; al mismo tiempo, los contendientes miran la raqueta para saber hacia dónde será lanzada la esfera, que entre más pequeña más rápida; pero no solo esto, también hay que tener buen estado físico, porque el espacio es muy reducido y esto requiere fuerza muscular y habilidad corpórea para reaccionar a velocidades que pueden alcanzar los 100 kilómetros en competencias profesionales.

Por si fuera poco, la mano que sostiene la raqueta, debe estar coordinada con la vista para poder responder a tiempo el veloz ping pong, que en menos de un segundo rebota como su vaivén para exigir atención, concentración y feroz reacción.

Por este motivo siempre las miradas estarán en esa pequeña pelota hecha de plástico celuloide, porque de alguna manera hay que responder con agilidad mental hacia donde será lanzada para evitar que el adversario responda a tiempo.

Factores como la técnica del jugador, el tipo de golpe, y hasta factores no controlables como el ambiente (viento, temperatura, superficie de la raqueta y de la mesa) influyen en la velocidad de la bola y hasta en la respuesta del deportista.

Algo sí es seguro, los ojos son una importante arma en este grandioso deporte que exige entrenamiento perceptivo visual y movimientos oculares, para evitar fatigas visuales reflejadas en visiòn borrosa o dificultad para enfocar la esférica.

A pesar de ello, la bola de 38 ó 40 mm no solo capta las miradas de los tenistas, sino también la de los espectadores.

«Unidos somos más. Más deporte, más región»