Rusia 2018, un Mundial de sorpresas y humildad

Rusia 2018, un Mundial de sorpresas y humildad Ha sido llamado el Mundial de las sorpresas.

Foto / World Soccer

Rusia 2018 ha sido el escenario donde los pequeños se han crecido. Los llamados equipos chicos cada vez están más preparados para el juego internacional; sin duda, en comparación con mundiales atrás, el despliegue de jugadores al exterior potencia a las selecciones nacionales. 

El fogueo de las estrellas nacionales en el exterior ha dado más nivel al Mundial, los equipos de poco renombre cuentan con jugadores de máximo nivel y tal vez esa ha sido una de las razones para ver los hitos que han sorprendido al mundo futbolístico.

Los amos de la esférica se han visto dominados por los pequeños, un Brasil y una Alemania que requirieron los minutos de reposición y que ni aún sus máximas estrellas les aseguraron un juego que tranquilamente los llevara a la celebración. Pensando en algunas de las selecciones suramericanas, sin duda, el paso de sus jugadores por el fútbol internacional, ha consolidado una fortaleza, llena de jerarquía y liderazgo para protagonizar grandes momentos en la historia del fútbol.

El fútbol sigue dando lecciones de humildad y tenacidad, no todo está escrito y aunque siempre se ha dicho que el partido dura 90 minutos, en esta ocasión hemos visto como hasta los 95 cualquier apremiante situación podría darse. Brasil y Argentina, empataron sus partidos ante equipos aparentemente inferiores. El Campeón Mundial, Alemania perdió con México y sufrió la victoria ante Suecia. Esta vez no ha habido pequeño, todos de alguna forma han demostrado el juego que los llevó a la máxima cita del Fútbol.

Panamá, en medio de unas derrotas tan abultadas, ha dado ejemplo de humildad al ver sus hinchas y jugadores celebrar el primer gol en la historia de los mundiales, humildad también al ver un técnico cuestionado por los hinchas de la selección que comanda.

Osorio luego de ser abucheado en la despedida que los mexicanos  le hicieron a su Selección, le dedicó los triunfos a ellos mismos, no hubo palabras de rencor, simplemente una actitud noble que lo engrandece por los propios hechos. Para Osorio todos los éxitos y triunfos, un risaraldense que ha sorteado con las críticas y displicencia de muchos, soportando y saliendo en victoria.

A pesar de las sorpresas, el Fútbol sigue imponiéndose de nombre, pesa la historia y aunque no haya sido un fútbol arrasador, ahí van los mismos: Francia, España, Brasil, Alemania. La efectividad es necesaria y aunque gusta el fútbol bonito, no es suficiente para este certamen. Siguen las emociones y el mundo disfruta del fútbol, un deporte que trasciende las fronteras y une las pasiones.

Que esta semana se siga viviendo la fiesta del fútbol, que se vean las escenas que exaltan la unidad, el juego limpio, los rostros de felicidad, las manos que levantan al caído. Eso es el Mundial.

«Unidos somos más. Más deporte, más región»

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