Rhinos Rugby Club terminó con honor su participación en el Súper 20

Foto / Suministrada

Con los botines puestos y el escudo tallado en el pecho, así culminó la fase semifinal el representativo de Risaralda este domingo 21 de octubre, pues perdió 44-13 ante Duendes en un partido cargado de emociones, que además lo dejó entre los cuatro mejores de Colombia. 

La antesala del encuentro marcó la ansiedad por escribir un capítulo propio en las finales del campeonato, si Rhinos ganaba, estaba triunfando ante uno de los mejores elencos del país, de no hacerlo, habría enfrentado en una fase definitiva a un admirable rival.

En prefacio de la narración no pudo contener detalles más ciertos, los jugadores de Rhinos lo hicieron sentir en el primer tiempo, mostraron ímpetu, amor por la camiseta, dejando en cada choque una dosis de sentimiento del que no se dudó porque el físico de la visita exigió al máximo.

Vea Galería de Imágenes: Los mejores momentos de la semifinal del Súper 20 de Rugby

Los primeros puntos llegaron a través de un penal que ejecutó Franklyn Minú, quien la lanzó entre los palos para poner el 3-0 a favor provocando los primeros aplausos del juego. Duendes, representativo de Antioquia, se tuvo paciencia, se guardó en energía y dejó el protagonismo servido para un equipo al que días antes le reconocieron, tiene trabajo.

Foto / Pablo Bohórquez

Luego, sobre los 11 de trámite, Johan Ortiz, el hombre de Selección Colombia igualó las cargas entre Rhinos y Duendes al acertar en una ejecución de penal, 3-3 en el marcador, pero esto sería apenas el inicio de una semifinal intensa en la Plaza de Ferias de Cerritos, occidente de Pereira.

En un primer tiempo donde el desempeño de los jugadores de Rhinos mereció reconocimiento, Duendes apeló a la magia para contrarrestar las oportunidades que se tejieron metro a metro en el terreno. Cuando Franklyn Minú anotó en un segundo penal sobre los 20 minutos, Johan Ortiz imitó a los 21 para poner el 6-6.

Un duelo parejo, cargado de emotividad en los familiares que asistieron a presenciar el cotejo, catalogado por los miembros de Rhinos como el más importante de su historia, sustentándolo con ese primer periodo que quedará para la memoria a corto plazo, porque el futuro nos es ajeno al éxito.

Con el empuje de los Rhinos, el primer tiempo no podía quedar en igualdad, Juan Pablo Ortiz, uno de los referentes durante el campeonato, aprovechó el desempeño de Minú, Herrera y Carvajal para sumar try que se celebró con conversión del mismo Franklyn para cerrar con un 13-6 parcial.

SEGUNDO TIEMPO

A otro precio se inició el segundo tiempo, el clima caliente que había escaseado en el primer tiempo en esta zona de la capital risaraldense, empezó aparecer entre el cielo pereirano para anunciar la entrada en rigor de la prueba semifinal.

De inmediato Sebastián Mejía, quien se ha convertido en una innegable figura para el Rugby colombiano en los últimos 10 años, entró a la acción con el primer try en su cuenta personal, respaldando a su equipo con un 13-11 parcial, achicando la diferencia con el local, anunciando algo.

¡Se animó la fiesta! porque del otro lado estaba Geovanny Carvajal, su similar, pero más joven, se pudo pensar que ese duelo entre experiencia y juventud resultó atractivo, mientras Ortiz, Herrera,  Minú, Ángel, chocaron una y otra vez protegiendo no solo el resultado, sino la reputación del trabajo labrado durante el torneo.

La mirada de impotencia de algunos contrastó con la explosividad de la visita, evidentemente Duendes se transformó en el segundo periodo, y con ello Sebastián Mejía que a los 9 minutos anotó de nuevo try con complicidad de Johan Ortiz.

Foto / Pablo Bohórquez

Con un 18- 13 en contra, el silencio empezó a aparecer en la afición de Rhinos y en el otro sector de la cancha, el fervor de Duendes tuvo origen, esto se encendió aún más con el tercer try de Sebastián Mejía sobre los 14 minutos, gesto que se complementó con la conversión de Johan Ortiz para poner el 25-13. ¡Qué dupla!

Sin embargo en el cafetero no hubo mucho por envidiar, a razón de empuje, ímpetu y corazón, los locales hicieron frente en el pantano de la Plaza de Ferias, enlodaron sus camisetas, como sacra muestra de la disputa.

El destino tenía otro relato preparado, a medida que pasaron los minutos el cansancio permitió que Rhinos se viera afectado por el buen desempeño táctico del cuadro antioqueño. A los 31 minutos de nuevo aparición de Mejía, try con conversión de Ortiz, resultado parcial 32-13.

Ante este resultado la respuesta de Rhinos fue seguir en el pie de la contienda, mostrando que el camino de rendirse no era una salida posible, menos viable como el mejor equipo de Rugby XVs de la región. Ahí, ahí fue que apareció el honor.

Se retomaron las voces de aliento de los Rhinos, que desde el lateral de la cancha no dejaron solos a sus compañeros que pese a los estridentes golpes trabajaron unidos. Ese ¡Vamos, vamos! tan necesario en casos donde el resultado no es amigable con el deseo tuvo mucho qué ver en la semifinal.

En ambiente de apoyo irrestricto, sobre los 34 minutos Duendes abultó el marcador, para esta oportunidad fue Maicol Machado el hombre que se anotó un try, seguido de la conversión por Johan Ortiz. 39-13, y sin bajar los brazos el equipo rayado concluyó el partido no sin antes dejarle lugar para que Carlos Yepes, de Antioquia, sellara un 44-13, cuando ya la diferencia entre risaraldenses y antioqueños fue más que evidente.

Sobre el acto protocolario, con algo de sal en la garganta los dueños del patio saludaron a sus verdugos, en quienes siguen reconociendo talento, porque el rival no es enemigo, no aquí, no en el Rugby.

HABLARON LOS PROTAGONISTAS

Jorge Acevedo (técnico de Rhinos)

Sabíamos que era un partido muy difícil, es el segundo mejor equipo del país, veníamos en ascenso y les hicimos un primer tiempo fuerte, duro, les resistimos. A este nivel ya es el ritmo de competencia, a nosotros nos falta tener más partidos de este nivel. Sin embargo el balance para nosotros es muy positivo, quedamos entre los cuatro mejores del país… Este no es el techo, queremos alcanzar la final el próximo año y para eso vamos a trabajar más duro” 

Sebastián Mejía  (Duendes)

Estamos muy contentos, primero porque tuvimos un gran partido, fue un partido muy duro, digno de una semifinal del torneo más importante del país. Agradecer a Rhinos por toda la entrega y la logística que hicieron para esto. Nuestro equipo aguantó, nos mantuvimos, sabíamos que en cualquier momento se iba a abrir, que Rhinos no iba a desfallecer tan fácil, que teníamos que tener paciencia, eso hicimos y pudimos sacar un buen margen que nos llena de confianza para trabajar en la final”.

«Unidos somos más. Más deporte, más región»

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