Que no se agote la agenda por los Juegos Nacionales 2023

Gobernaciones de Caldas, Quindío y Risaralda, comprometidas con los Juegos Nacionales y Paranacionales 2023

Es histórico que los tres departamentos del Eje Cafetero se unan por un propósito común.

Pero en un año de estrategia política y hasta «politiquera», cargado de intereses de campaña, en aspiraciones a alcaldías, gobernaciones, concejos y asambleas, es necesario que la agenda por los Juegos Nacionales 2023 no se agote, y por el contrario siga siendo la bandera de las actuales administraciones, y ojalá no el discurso oportunista de los candidatos interesados en ganar adeptos y votantes.

Si bien, desde que se creó la RAP – Región Administrativa de Planeación – en junio del 2018, se han planteado diversos temas y proyectos estratégicos para el Eje Cafetero, realmente es el sueño de traer los Juegos Nacionales 2023 a esta región, el motivo que ha logrado movilizar con más fuerza las voluntades políticas del también conocido triángulo del café en Colombia.

En la puja por lograr la sede de los anhelados juegos, se han vinculado concejales, diputados, periodistas, medios de comunicación, gremios, congresistas y por supuesto los mismos gabinetes de los tres departamentos, quienes han sostenido múltiples reuniones en las tres ciudades principales, para presentarle de manera oficial tanto al gobierno del presidente Duque como a Coldeportes Nacional, una candidatura sólida que ponga al Eje Cafetero en el centro de la decisión.

Y los argumentos han sido más que fundamentados, esta es una región próspera, con proyección no solo turística, comercial y de servicios, si no también con impulso de innovación en agroindustria, biodiversidad, medio ambiente, infraestructura y hasta ciencia y tecnología.

Son proyectos que hablan bien de la región, que retan a sus gobernantes y líderes para que el gobierno nacional vuelva a mirar esta zona del país con la potencialidad de ser anfitrión en las justas deportivas nacionales del 2023.

Y es que el deporte no puede pasar desapercibido ni por esta zona ni por los departamentos vecinos que con frecuencia se desplazan a Manizales, Pereira y Armenia y otros municipios cercanos, para disfrutar de sus escenarios deportivos, infraestructura en algunos casos optimizada y en otros por mejorar, pero al fin, escenarios que han acogido en los últimos años los torneos nacionales interligas de las disciplinas más tradicionales, demostrando que existe capacidad de alojamiento, fortaleza en la prestación de servicios y un conjunto de escenarios deportivos que entre los tres departamentos pueden dar respuesta a las necesidades de las justas deportivas más importantes de Colombia.

No es poco lo que se le pide al gobierno nacional, por el contrario cada vez se afianza más ese deseo, que es ya un sueño para la región cafetera por excelencia de Colombia, y qué mejor escenario que el Eje Cafetero para aunar propósitos ambientales, creativos, artísticos y culturales en un entorno de conectividad y herencia cultural, con un evento deportivo de la magnitud de los Juegos Nacionales 2023.

Para ello y todo lo demás el Eje encuentra caminos para los cuales ya está unido.

«Unidos somos más.Más deporte, más región»

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